Carta de Ignacio González G. desde Concepción al Dr. Mario Altamirano quien se encuentra en Nueva York. La misiva comienza confirmando que recibió su carta del 27 de julio consultando sobre condiciones de trabajo y vida, excusándose de no haber respondido antes. Luego entrega los antecedentes consultados en cinco puntos:
En primer lugar señala que el equipamiento del Instituto ha sido adquirido gracias a la Fundación Kellogg y a un presupuesto que entrega el Consejo de Investigación destinado a gastos de consumo, fomento y biblioteca.
En segundo lugar indica que las carreras que reciben enseñanza del Instituto de Fisiología son Medicina, Dentística, Farmacia y Enfermería con un total de 125 alumnos. En este punto menciona que el Dr. Gunther hacía solo una cátedra común y luego dividía grupos prácticos, pero que en todo caso el Director del Instituto tiene libertad para reorganizar este ámbito. Siguiendo con este tema indica que la Facultad determina el programa y que éste se realiza en dos años, siendo el primero morfológico y el segundo fisiológico. Este punto finaliza entregando los detalles de los docentes de la escuela, sus especialidades y la forma de trabajo colaborativo.
En tercer lugar le comenta que los ayudantes renunciaron junto al Dr. Günther, que las plazas están disponibles y se está reorientando la distribución de los ramos.
En cuarto lugar se refiere a la estabilidad laboral de los profesores y la renta.
En quinto lugar le entrega el nombre de los directivos de la Facultad, sus especialidades y las actividades que realizan.
En otro apartado detalla las facultades de la Universidad y sus características. Luego le informa sobre la Biblioteca Central y del Instituto de Fisiología fundada por Alejandro Lipschutz.
A continuación le comenta que el curso comenzará en agosto de 1956 por lo que espera que durante este tiempo se capacite en Estados Unidos con una beca de la Fundación Kellogg y que en caso de contar con un colaborador se le puede reservar una plaza. En este punto de la misiva recalca el buen ambiente de Concepción, la tranquilidad de vivir en una ciudad pequeña y el liderazgo la Escuela de Medicina a nivel nacional. Luego señala que adjunta una foto del edificio y que ante cualquier otra consulta le escriba. Finalmente se despide reiterando la renta aproximada de 120.000 pesos que se le ofrece.